LAS ESCRITURAS CÁTARAS
Tanto los cátaros como los bogomilos tenían sus propios libros sobre los que fundamentaban su creencia y su fe. Básicamente eran libros relativos a las santas escrituras cristianas, aunque no necesariamente de carácter canónico como suele definirse a los libros de la ortodoxia romana. ¿Cuáles son y que características poseen las escrituras que se han conservado del catarismo? Veamos pues los distintos textos doctrinales utilizados por los cátaros que han llegado a nuestros días y que en resumidas cuentas son los siguientes:
– La Biblia Cátara de Lyon que consiste en una versión íntegra del Nuevo Testamento escrito en lengua vernácula occitana a principios del siglo XIII.
– Los Rituales de Lyon y Florencia, el primero en occitano y el segundo en latín y que describen las prácticas litúrgicas como el consolament , servisi, melhorament…
– El Ritual de Dublín, que contiene una exégesis del Padrenuestro y un sermón sobre la Iglesia de Dios por parte del obispo al nuevo candidato para el consolamentum.
– Tratado Cátaro Anónimo, recogido en la obra Contra Manicheos atribuida a Duran de Huesca en el siglo XIII, famoso polemista contra el catarismo, y que recoge una recopilación de citas comentadas bajo una perspectiva dualista cristiana.
– El Libro de los dos Principios o Liber de duobis Principiis, tratado de teología escrito por Juan de Lugio o un discípulo suyo de la iglesia italiana de Desenzano en el siglo XIII, donde se demuestra la existencia de dos principios coeternos y opuestos.
– La Cena Secreta del Reino de los Cielos o Interrogatio Iohannis, apócrifo bogomilo de origen eslavo, fechado en torno al siglo XI y que refleja el diálogo entre el apóstol Juan y Jesucristo sobre los mitos del dualismo, de la caída de los ángeles, la creación del mundo y del hombre, el poder del Demiurgo, la misión de Cristo y otros.
– La Visión de Isaías, otro apócrifo de tradición antigua vetero-testamentaria que ofrece trazos comunes con los Libros Henoch esenios o de corte cabalístico abordando la subida de Isaías a través de los siete cielos y que fue extraído de un apócrifo cristiano del siglo II llamado La Ascensión de Isaías.
La Biblia càtara de Lyon es un manuscrito medieval redactado en su totalidad en lengua occitana que se puede fechar alrededor del año 1250. Fue encontrado en la Biblioteca de la Academia de las Ciencias, Letras y Artes de Lyon. Tal manuscrito traducido sigue las pautas del Nuevo Testamento canónico de la iglesia romana aunque resulta evidente pensar que la exégesis cátara o propia interpretación sometía el texto a una perspectiva exclusivamente mística, no tomando al pie de la letra los relatos expuestos. En cuanto a los dos Rituales de Lyon y Florencia junto con el de Dublín que han llegado hasta nosotros nos muestran cómo las partes esenciales de los distintos rituales cátaros presentan un carácter arquetípico y arcaico que los acerca a los rituales y antiguas costumbres de la iglesia primitiva, muy especialmente al catecumenado, al bautismo del espíritu y a la ordenación. De tal manera, el ritual occitano afrima respecto al consolamentum las siguientes palabras: Este santo bautismo lo ha guardado la Iglesia de Dios desde los apóstoles hasta hoy y ha sido transmitido de buenos hombres a buenos hombres hasta este momento.
En cuanto al Tratado cátaro anónimo recogido y refutado por Durán de Huesca en su obra Contra Manicheos, está compuesto por un sucesión de citas evangélicas a modo de argumentos para utilizarlos en las controversias y disputas teológicas (auténticos duelos oratorios en toda regla), que hubo entre los herejes y los eclesiásticos romanos entre la segunda mitad del siglo XII y principios del XIII, antes de estallar la Cruzada albigense (una de las más significativas fue la de Lombers en el año 1165). El tratado rezuma una visión dualista del Evangelio ya que se centra en la doctrina de los dos principios o creaciones: de un lado el reino espiritual (regnum celeste, regnum Christi et Dei, creatio bona y otros.) obra del verdadero Dios y del otro, el mundo malvado y material (mundos malus, creatio mala, praesens creatio, etc.) obra del “Dios malvado”. Para el autor cátaro lo que se trata es la búsqueda de la redención de las almas caídas en el mundo corrupto, las cuales a través de un sistema de reencarnaciones sucesivas y gracias a la gnosis o Entedensa del Be(Entendimiento del Bien), puedan lograr el acceso a la eternidad. En cuanto al famoso Libro de los dos principios que viene a ser el más importante del catarismo fue escrito en el año 1240 en latín en la Lombardía italiana. Con más énfasis que el anterior Tratado Anónimo descrito, dicho libro compuesto por el perfecto cátaro Juan de Lugio, o quizás por un discípulo suyo, viene a ser un ensayo escolástico donde se traza de forma racional, las bases de un dualismo absoluto que se hallan reflejadas de manera velada en las Santas Escrituras. Dicha exposición sigue el rigor didáctico que solían utilizar los teólogos cristianos romanos en las universidades medievales europeas en sus controversias teológicas. Los planteamientos del tratado de Juan de Lugio no carecen de coherencia y rigor según los especialistas ya que son los típicos del dualismo absoluto, que se basan en la existencia de dos mundos contrarios, el eterno y el temporal, emanaciones ab aeterno de Dios y el Mal.
Veamos los dos apócrifos utilizados por el bogolismo y el catarismo. Respecto al libro La cena secreta del Reino de los Cielos o Interrogatio Iohannis, nos presenta, bajo la fórmula de un diálogo ficticio entre Cristo y su discípulo Juan, una auténtica cosmogonía revelada relativa a la organización del mundo celeste. Dicho libro explica asimismo la creación del mundo visible y del ser humano, así como la historia de la humanidad en época del Antiguo Testamento y la posterior venida de Cristo como revelador de los conocimientos para logar la redención al final de los tiempos.
Se supone que La visión de Isaías fue escrito entre los años 100-150 d.C. en lengua griega. Dicho libro engloba una antigua versión conocida como La Ascensión de Isaías que pudo ser escrito con anterioridad, a finales del siglo I, entre los años 88-100 d.C. Curiosamente, La visión de Isaías llegó a ser conocida también por Orígenes, padre de la iglesia que casi llegó a ser declarado hereje en las posteriores y famosas controversias origenistas, así como por la herejía arriana de notable arraigo entre los pueblos ostrogodo o visigodo y posteriormente, por la corriente gnóstica de los priscilianistas del siglo IV, ubicados principalmente en las tierras del norte hispánico romano.
Todos estos documentos, en principio, serían la totalidad de las escrituras cátaras conocidas hasta la actualidad. Pero además, debemos tomar en cuenta también los archivos de la Inquisición, reunidos en la colección de los llamados Fondos Doat y forzosamente, otras obras de menor rango donde la doctrina cátara se ve reflejada como son los escritos literarios siguientes: La leyenda de Barlaam y Josafat, El viaje de San Patricio al purgatorio, El poema de Boecio, Las visiones de Tendal y San Pablo, algunos Apólogos o Exempla como el conocido exemplum del Pelícano que fue tomado originariamente de los antiguos bestiarios de tradición griega y latina, y finalmente otras composiciones de los trovadores provenzales y catalanes.